El festival de la cosecha es el feriado más grande para los coreanos. Durante el festival, la mayoría de los coreanos visitan su ciudad natal. Pero algunas personas no disfrutan el feriado debido a su pobreza.
Los miembros de la Iglesia de Dios lamentaron mucho la situación de su prójimo que atravesaba momentos difíciles, y realizaron eventos para compartir con ellos el amor de Dios y la compasión.
La iglesia de Bukgu II, Daegu, realizó un bazar para el prójimo poco privilegiadoEl 12 de septiembre, se realizó un bazar para el prójimo poco privilegiado en la iglesia de Bukgu II, Daegu. En el interior del edificio de la iglesia, se vendieron más de 1500 artículos. Todos los artículos fueron donados por aproximadamente 200 miembros de la iglesia y sus vecinos.
ⓒ 2005 WATV
Los precios de los artículos oscilaban entre cien y varios miles de wones. El dinero recibido fue usado para ayudar a su prójimo. Los artículos de mayor precio eran de aproximadamente diez mil wones. Los clientes fueron los que elevaron los precios porque querían que su dinero fuera utilizado para su prójimo.
Antes de que los miembros contribuyeran con artículos como ropa, electrodomésticos y artículos para el hogar, los limpiaron y arreglaron para que parecieran nuevos. Un ciudadano que visitó el bazar dijo: “El prójimo está sufriendo de pobreza. He venido aquí para ayudarlos. Espero que todos se sientan animados por nuestro afecto y amor”.
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Los voluntarios vendieron comida además de Ddeockbokki, pasta de pescado, alimentos fritos, huevos hervidos, etc. Los visitantes pudieron recorrer el bazar y conversar con su prójimo disfrutando de deliciosos platos.
El jefe de templo, Choi Jung-man, que preparó este evento durante quince días, manifestó: “Dios dijo: ‘Ama a tu prójimo como a ti mismo’. Aunque no tenemos mucho, si podemos compartir con nuestro prójimo, somos ricos. Hemos preparado este bazar deseando que nuestro prójimo tenga un feriado feliz”.
El 15 de septiembre se entregó al prójimo el dinero recaudado en el bazar a través del municipio de la aldea. El prójimo que recibió el dinero pudo sentir el amor de Dios y dijo: “Viviremos con esperanza, haciendp buenas obras para los demás. Esto es retribuir su ayuda”.
La iglesia de Gijang, Busan, realizó el servicio voluntario de corte de cabelloEl 14 de septiembre, los miembros de la iglesia de Gijang visitaron un auditorio para ancianos en el Apartamento de Kyori Jugong, y les ofrecieron cortes de cabello, deseando expandir el amor de Cristo poniendo en práctica la enseñanza de Dios de servir a los ancianos como a nuestros padres y ser una ayuda para revivir la virtud de los coreanos de respetar a los mayores.
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El jefe de templo, Jeong Kwang-seop, empezó el servicio voluntario expresando: “Complazcamos a los ancianos a través de nuestra obra”, y animó a los voluntarios diciendo: “Nuestras buenas obras, aunque pequeñas, pueden ser una gran luz que muestre la gloria de Dios en el mundo. Hagamos nuestro mayor esfuerzo”.
Los cuatro estilistas profesionales voluntarios y sus ayudantes, cortaron el cabello a los ancianos que visitaron el auditorio y se esforzaron por agradarles masajeando sus hombros. “Esperamos también poder cortar todas las preocupaciones de su corazón”. Quedaron asombrados al pensar que podían agradar a los ancianos con sus habilidades. Después del corte de cabello, todos los ancianos que se habían reunido en el auditorio, visitaron a los que no pudieron caminar hasta el auditorio y también les cortaron el cabello.
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Antes de regresar a sus hogares, barrieron todo el cabello y la basura del suelo, aunque los ancianos les habían pedido que no lo hicieran, diciendo: “Ustedes han trabajado duro. Dejen esto para nosotros”. Al dejar el auditorio, los voluntarios agradecieron a Dios por darles la oportunidad de mostrar su gloria. La iglesia de Gijang decidió continuar el servicio voluntario para los ancianos en su aldea.
Los miembros de Seongnam consolaron al prójimo necesitadoEl 15 de septiembre, los miembros de Seongnam entregaron el amor de Dios al prójimo necesitado. Al escuchar que su prójimo no podía disfrutar del feriado por sus dificultades económicas, les dieron consuelo a través del municipio de la aldea, deseándoles un feriado feliz.
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Las palabras de consuelo y las donaciones se entregaron a la oficina de la 3ra. aldea de Yatap y a la oficina de la aldea de Siheung. Hong Ki-ho, presidente de la oficina de la 3ra. aldea de Yatap, dijo: “Ya que la economía empeora, el número de desempleados está aumentando. He estado muy preocupado porque las manos de ayuda han disminuido. Muchas gracias. Su ayuda será muy grande para nuestro prójimo”. Shin Byun-seop, presidente de la oficina de la aldea de Siheung, también les pidió su constante preocupación.
Algunos miembros entregaron regalos directamente al prójimo necesitado, diciendo: “Esperamos que pasen un feriado feliz”. El prójimo les expresó su gratitud, diciendo: “Su amabilidad permanecerá en nuestros corazones. Llevaremos una vida buena y honesta para retribuirles”.
Lo que hace arder una montaña no es un fuego grande sino uno pequeño. Esperamos que las buenas obras de los miembros sean una pequeña luz que derrita este frío mundo.
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