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El 28 de febrero, cuando llovía como si se adelantara la llegada de la primavera, se llevó a cabo la “Ceremonia de Premiación de Estudios y Becas” en el edifi cio WMC de la Gran Asamblea, para animar a los estudiantes a estudiar más duro y estimular su fe antes del inicio del nuevo semestre. 101 estudiantes actuales de secundaria y 51 nuevos ingresantes de secundaria, asistieron a la ceremonia de premiación junto con sus padres. Ellos pasaron un momento significativo estableciéndose metas en su vida de la fe y solidifi cando su voluntad académica.

Antes de la ceremonia, la Madre expresó su gozo por los estudiantes que crecieron rectamente, y les pidió que cuiden a sus amigos en necesidad y que mantengan una buena amistad con ellos como hijos e hijas de Dios, a pesar de vivir en un ambiente altamente competitivo por el examen de admisión. Ella también los instruyó, diciendo: “Por favor, traten de esforzarse mucho en su vida escolar y asimismo en su vida de la fe, confi ando en Dios quien les concede un resultado según como hayan orado y se hayan esforzado. Muestren la gloria de Dios a través de sus buenas obras, como buenos ejemplos para los demás, para que puedan llevar buenos frutos” (Mt. 5:16, Mt. 7:7-11).

El Primer Pastor Joo Cheol Kim enfatizó que es deber de los estudiantes honrar a Dios, respetar a los mayores, y salvar las almas de sus amigos mientras estudian duro sus cursos en la escuela y asimismo la Biblia. También deseó que jueguen un rol de liderazgo en la obra del evangelio, diciendo: “Por favor establezcan una meta defi nida y alcáncenla, manteniendo una gran fe en sus corazones, para que puedan abrir la puerta a un futuro brillante como el rocío del alba”.

Pronto se dio inicio a la ceremonia. La Madre otorgó certifi cados de estudios al representante de los estudiantes de primer año y a los estudiantes actuales, y animó a ambos grupos de estudiantes que se habían esforzado estudiando muy duro y a sus padres que habían estado haciendo esfuerzos para criar a sus hijos de una manera recta. Los estudiantes demostraron su firme decisión, diciendo: “Damos gracias a Dios Elohim por el amor y la gracia que nos han dado. Ganaremos diez talentos más predicando el evangelio a nuestros amigos y guiándolos a Sion por medio de buenas palabras y obras mientras estudiamos duro”. Con el espíritu de la juventud como el rocío del alba, empezaron con fuerza el nuevo semestre.